Disfruta de un flujo constante de albahaca fresca para tus recetas favoritas de pesto.
La albahaca fresca nunca es suficiente, ¿verdad? Simplemente coloca algunas hojas en una licuadora, añade piñones, un poco de queso duro y un buen chorro de aceite de oliva extra virgen. Mezcla todo para crear un pesto perfecto para acompañar pasta o como cobertura para pescado al horno. Delicioso!
Imagina poder comprar albahaca una vez y, a partir de esa planta, generar un suministro interminable. Es posible!

Cómo Tomar Esquejes de Albahaca
Tomar esquejes de albahaca es muy sencillo. Solo necesitas una taza, un poco de agua y, por supuesto, albahaca. Puedes obtener esquejes de plantas que compres en el vivero, en el supermercado o incluso de paquetes de albahaca comprados en tienda.
- Selección de Tallo:
Elige tallos saludables y evita aquellos que estén en flor o a punto de florecer, ya que no enraízan bien y crecen muy lentamente. El esqueje ideal mide entre 8 y 15 cm de altura. - Corte Limpio:
Utiliza tijeras afiladas, podadoras o un cuchillo para hacer un corte limpio justo debajo de un nodo (donde emergen las hojas del tallo). Es crucial cortar limpiamente para no dañar el tallo. - Eliminar Hojas Inferiores:
Quita algunas hojas para reducir la pérdida de humedad por evaporación. Deja unas pocas hojas en la parte superior para que la planta pueda seguir absorbiendo energía de la luz solar. - Enraizamiento:
Coloca los esquejes en una taza con agua, asegurándote de que solo las hojas queden por encima del nivel del agua. Coloca la taza en un alféizar soleado. En pocos días, deberían comenzar a desarrollar raíces. Mantén el agua limpia y reemplázala si se nubla.
Cuidando tus Esquejes de Albahaca
Una vez que los esquejes hayan desarrollado un buen sistema de raíces, trasplántalos a macetas pequeñas o directamente al suelo. Utiliza una mezcla de tierra para macetas con un poco de perlita para mejorar el drenaje, lo cual es esencial para estas hierbas que aman el calor.
- Plantación:
Llena parcialmente la maceta con la mezcla de tierra, sostén el esqueje con cuidado por las hojas para no dañar el tallo y llena el resto con tierra. Presiona ligeramente y riega bien. - Ubicación y Riego:
Coloca las macetas en un lugar cálido y soleado. Mantén la tierra húmeda, especialmente al inicio, para fomentar un crecimiento robusto de las raíces. - Crecimiento y Cosecha:
En aproximadamente un mes, podrás comenzar a cosechar, cortando secciones de la planta para tus recetas. Esto no solo proporciona hojas frescas, sino que también fomenta un crecimiento más tupido y saludable de la planta, asegurando un suministro continuo de albahaca.
Beneficios de los Esquejes de Albahaca
Tomar esquejes no debilita la planta madre. Al contrario, al cortar un tallo principal, la planta responde produciendo más brotes laterales, creando una planta más densa y productiva. Este método asegura que tu albahaca no solo sobreviva, sino que prospere, brindándote hojas frescas durante todo el año.
Conclusión
Cultivar albahaca a partir de esquejes es una forma eficiente y sostenible de mantener un suministro constante para tus deliciosas recetas de pesto y más. Con unos pocos pasos simples, puedes transformar una planta comprada en una fuente inagotable de albahaca fresca, asegurando que nunca te falte este aromático ingrediente en tu cocina. Empieza hoy mismo y disfruta de los beneficios de tu propio jardín perpetuo de albahaca!